7.39 ¿Puede tener sentido mi sufrimiento? ¿La eutanasia es una solución?
Lidwina se cayó en el hielo a la edad de 14 años. Este fue el comienzo de 38 años en su lecho de enfermedad con mucho sufrimiento y dolor. Al comienzo ella estaba enojada con Dios, pero luego descubrió como su sufrimiento la acercó a Jesús quien sufrió tanto en la cruz para darle vida. A pesar de que su vida no era como ella quería que fuera, seguía siendo un regalo de Dios. Su intensa fe la convirtió en una guía sabia para muchos visitantes a su lecho de enferma.
Las personas que están pensando en pedir la eutanasia a menudo están muy angustiadas y sufriendo. Aunque parezca que cierto sufrimiento es inaguantable e inhumano, esto es aún parte de de la vida que Dios nos ha dado. El ejemplo de Lidwina nos muestra que el sufrimiento también puede servir un propósito. Tu sufrimiento puede ayudarte a acercarte a Jesús e incluso ser una fortaleza para otros. Debemos hacer todo para consolar a los enfermos, y disminuir el sufrimiento de los moribundos, pero permitir que ellos u otros tomen la decisión de quitarse la vida es contrario a la dignidad humana recibida de Dios.
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